Valle-Inclán

En el blog de lengua, cosas de lengua.

Ramón María del Valle-Inclán

Ramón José Simón Valle Peña, conocido como Ramón María del Valle-Inclán (y Montenegro) (Villanueva de Arosa, 28 de octubre de 1866 — Santiago de Compostela, 5 de enero de 1936), formó parte de la corriente denominada Modernismo en España y estuvo próximo, en sus últimas obras, al alma de la Generación del 98; es considerado uno de los autores clave de la literatura española del siglo XX.

Obra de Valle-Inclán

Valle-Inclán fue poeta, novelista y, sobre todo, un excelente dramaturgo. Fue un autor determinante en la renovación del drama del S. XX.

Valle se inició literariamente en el mordernismo. Sus obras más representativas durante este periodo son las Sonatas (Sonata de Otoño (1902), Sonata de Estío (1903), Sonata de Primavera (1904) y Sonata de Invierno (1905)). En ellas relata, de forma autobiográfica, los amores del Marqués de Bradomín (un Don Juan ochecentista, cínico y sensual).

Tirano Banderas (1926) narra la caída del dictador sudamericano Santos Banderas, personaje despótico y cruel que mantiene el poder gracias al terror y a la opresión. Es una excepcional descripción de la sociedad sudamericana y la primera vez que se aborda literariamente la dictadura.

Cabe destacar también una de las mejores y más importantes obra en toda la prosa modernista hispana: "Flor de Santidad". Esta obra, sin huir de las formas musicales y coloridas del modernismo, se centra un poco más en las tradiciones populares y leyendas gallegas con las que Valle se familiarizó en su infancia.

Sin embargo, la trascendencia de Valle-Inclán en la literatura universal procede de la creación del esperpento.

El esperpento es la técnica literaria consistente en abordar asuntos graves desde una perspectiva burlesca. Al combinar la seriedad de los asuntos con la risa, brota lo grotesco.

En sus esperpentos, Valle presenta la realidad deformándola: cosifica y animaliza a los personajes (es decir, los mira "desde arriba"), personifica animales y objetos, une el lenguaje lírico a la expresión mas soez, etc.
Utiliza todo esto pare denunciar la realidad social y política de España y de quienes viven en ella en ese momento.

Dos buenos ejemplos de sus esperpentos son Luces de bohemia (1920 y 1924), y el volumen titulado Martes de Carnaval (1930).

Valle-Inclán, al igual que Miguel de Unamuno y Azorín, se enfrenta directamente al teatro comercial vigente. Esos tres autores muestran una clara oposición al teatro realista, costumbrista y de corte burgués que tanto éxito tenía en los escenarios, si bien cada uno de ellos tendrá su técnica particular.

Todos los enlaces llevan a Wikipedia.